En los últimos años y meses se está hablando mucho sobre la Cuarta Revolución Industrial, basada en la llamada Industria 4.0, y qué puede suponer ésta en el futuro de la fabricación industrial.
Para poner este tema en contexto, debemos partir de ver cómo en los últimos tres siglos el mundo ha sufrico cambios dramáticos fruto de la aparición de nuevas tecnologías que han afectado profundamente a la humanidad.
- En el siglo XVIII la introducción del vapor y de la energía hidráulica, junto con los avances en los dispositivos mecánicos, comenzó a transformar la estructura económica básica de muchos países, que empezó a pasar de agraria a industrial.
- El siglo XIX llevó las cosas aún más lejos con la introducción de la producción en masa, las piezas intercambiables y el uso generalizado de la electricidad. Muchas personas abandonaron las granjas y campos y se trasladaron a áreas urbanas para trabajar en la industria.
- Los avances en electrónica, automatización y tecnologías de la información caracterizaron la tercera revolución industrial en el siglo XX. La demanda de mano de obra cualificada aumentó dramáticamente, reduciendo poco a poco las oportunidades para los trabajadores no cualificados.
- La Industria 4.0 es una revolución del siglo XXI generada por los rápidos avances en la tecnología digital y en la convergencia acelerada de todas las tecnologías con las ciencias físicas y biológicas. Tal vez las razones más convincentes para aceptar que la cuarta revolución industrial está entre nosotros son los avances en áreas como la inteligencia artificial, los vehículos autónomos y la velocidad a la que todo esto está sucediendo.
Entonces, ¿qué significa todo esto para los fabricantes en general y para el mecanizado CNC en particular?
Aquí hay 5 hechos a considerar:
1. Mantener el status quo ya no es una opción viable
El ritmo del cambio tecnológico continúa acelerándose, por lo que es esencial mantenerse al tanto de los nuevos desarrollos y actuar rápidamente en lugar de adoptar una actitud de espera.
Es posible que no podamos implementar todos los avances más recientes que van apareciendo, pero deberíamos aplicar todo lo que podamos a aquellas partes de nuestro negocio que nos proporcionarán mayor ventaja competitiva.
2. Elegir flexibilidad
En el pasado podría tener sentido una solución a corto plazo, como agregar otra máquina herramienta dedicada para expandir la capacidad de fabricación.
Sin embargo, con el ritmo actual de cambio, se hace necesario pensar a largo plazo mediante la adición de equipos que no sólo satisfacen una necesidad inmediata, sino que también son lo suficientemente flexibles para adaptarse fácilmente a las demandas futuras.
3. Lo «nuevo» tiene una vida útil increíblemente corta
Debido a que la información se encuentra tan fácilmente disponible para todo el mundo, las ideas se propagan rápidamente y muchas personas, a lo largo de todo el mundo, desarrollan soluciones similares simultáneamente.
Por lo tanto, desarrollar nuevas y mejores maneras de fabricar piezas y productos puede que ya no sea suficiente para diferenciarse de la competencia. Esto no significa que no debamos mejorar continuamente los métodos y procesos, pero debemos considerar el valor total que proporcionamos a los clientes. Lo que nos lleva a:
4. Poner el foco en la satisfacción general del cliente
Aunque hacer una buena pieza a un precio competitivo antes era suficiente para muchos clientes, hoy demandan mucho más: cambios más rápidos, entregas a tiempo, calidad excepcional con tolerancias más estrictas y capacidad de lidiar con cantidades fluctuantes de pedidos.
Los clientes hoy quieren proveedores con los que sea fácil hacer negocios —lo que significa que harán todo lo dicho antes con una sonrisa—.
En una era en la que todos tenemos acceso a la misma tecnología e información, lo suficientemente bueno nunca es lo suficientemente bueno.
5. Amplía tu perspectiva
Si tienes una imagen demasiado «estrecha» de tu empresa, puedes perder las oportunidades que el avance de la tecnología y la convergencia proporcionan.
Por ejemplo, si defines tu negocio simplemente como un taller de trabajo de corte de metal con CNC, en lugar de como un proveedor de servicios industriales, puedes estar menos abierto a nuevas posibilidades, como el empleo de la fabricación aditiva (impresión 3D) y medios substractivos, como el mecanizado por arranque de viruta.
Si bien enfrentarse los desafíos de la Industria 4.0 puede parecer desalentador en un principio, también es cierto que hay grandes oportunidades para aquellos que abrazan esta última revolución industrial.
Traducción libre del blog de Gosiger